lunes, 2 de octubre de 2023

Pensando en voz alta. (spoiler de ideologia conservadora, lea bajo su propio riesgo de sentirse ofendido)

 Tomando en cuenta que bajo estándares modernos (y también algunos no tan modernos) me han considerado insensible, carente de empatía, etc. y posiblemente carente de cierta humanidad también, procedo a iniciar la exposición de algunas de mis ideas, aclarando de antemano que se trata de mi opinión personal y de la suma de conceptos que a mí me parecen válidos. No son necesariamente la realidad física (y de hechos) y objetiva de todas las demás personas.

Dicho esto, me causa mucho desconcierto y me parece bastante incomprensible toda esta idea moderna de la popularización de la ideología de género. Pienso que es natural que me cueste trabajo pensar en la normalización de conceptos como: "El género es un concepto fluido y un constructo social", cuando la base de dicho concepto es en mi realidad algo que tuvo un marco de referencia que durante mucho tiempo conservó una congruencia bastante aceptable y es recientemente cuando se ve desafiado y hasta se propone sea eliminado del todo... en beneficio de una minoría.

Quizás deba empezar a fundamentar mi tren de pensamiento desde allí, desde lo que en mi mente se ha fundamentado como lo correspondiente a las minorías.

Un concepto base que he tenido en la mente desde hace mucho tiempo, es que las mayorías (al menos las humanas) coinciden, tienen a adquirir mayor validez que las promovidas por minorías. Y que no sólo es un proceso natural, sino que cuando las cosas surgen de las mayorías en consenso propio, conllevan la tendencia al bien o a la conveniencia común, y como tal, son las minorías quienes tienen que dar un esfuerzo extra por acomodar a las mayorías.

Y supongo que de allí se apoyaron conceptos sociales como la democracia (el gobierno de las mayorías) y la toma de decisiones por votación, etc.

Y si lo que deciden las mayorías y les es natural tiene una prioridad justificadamente buena para la sociedad en su conjunto, a expensas de unos cuantos... ¿por qué habría que hacer las cosas al revés?

Podría considerarlo si lo propuesto por las minorías efectivamente trajera consigo beneficios evidentes para la mayoría...pero si no lo hace... ¿que sentido tiene?

He escuchado, por ejemplo, argumentos que parecen lógicos, respecto a la identidad de género y su deconstrucción e invalidación como algo que se deba imponer a otros. Uno de estos argumentos me parece propuesto de una manera evidentemente grosera, aunque entiendo lo que provoca el tono en el que ocurre.

Una persona pregunta a otra el por qué rechaza la idea/concepto de la identidad de género y la autodeterminación de la misma. Y la otra persona le responde con una pregunta que resume bastante bien lo que esa persona entiende y siente respecto al tema, haciendo una analogía: ¿Porqué no tienes "X" años? (una edad que de manera muy obvia no corresponde físicamente a la realidad de la persona a quien se dirige la pregunta).

Mi primera impresión del argumento es que la analogía es válida y equivalente. Porque creo que hay una realidad objetiva, y percepciones subjetivas d la misma, porque me gusta pensar que hay lógica, razón y ciencia en las cosas, más allá de lo que cada persona cree. Porque me gusta pensar que mas allá de mas diferencias entre las personas, hay cosas que pueden crear consenso sin la necesidad del convencimiento.

El argumento en la conversación que mencioné anteriormente compara la identidad de género con la de la edad. La pregunta presupone que, si las personas pueden autodefinir su identidad de género sin fundamentarla en una realidad fáctica y objetiva (es decir, si se puede separar del todo el género del sexo biológico), ¿no se podría también separar la edad del estado físico del cuerpo?

Y aunque la pregunta desconcierta y deja en jaque a la persona que defiende la identidad de género, otro argumento resultante le deja también sin respuesta. Y es que el hecho de que una idea sea una percepción subjetiva de una persona, no obliga a las demás personas a concebirla como realidad objetiva.

Y con esto vuelvo a las minorías y las mayorías. En mi concepto de ello, la opinión de las mayorías naturalmente se convierte en algo más cercano a una realidad objetiva, que la de las minorías. Y todo concepto promovido por minorías (aun cuando es una representación de una realidad objetiva) lleva tiempo en su adaptación, porque se vuelve un elemento disruptivo en lo aceptado y establecido.

No quiere decir que no pueda cambiarse la opinión de las sociedades. Quiere decir que conlleva tiempo y un proceso de normalización.

Separar iglesia de estado llevó tiempo. Dar derechos y oportunidades a las mujeres ha llevado tiempo. La aceptación Gay/Lesbiana como algo que es parte de algunas personas, ha llevado tiempo, la aceptación de que no hay razas en la especie humana, ha tomado tiempo...

Por qué, entonces, esta prisa por la aceptación generalizada de la identidad de género, y por qué en su defensa también hacen comparaciones con otras cosas como el racismo y la discriminación (en su concepto socialmente negativo) cuando se les cuestiona la imposición de su ideología de minorías, sobre las ideas establecidas de las mayorías?

¿Qué tan realmente equivalentes son unas comparaciones a otras?, son valorees subjetivos u objetivamente equivalentes?

Si la identidad de una persona está compuesta por diferentes aspectos y sus definiciones, ¿Hay una escala de prioridad en esa colección de aspectos y por tanto un orden a ellos, y cual es ere orden?

Lo que conocemos la mayoría de las personas, como identidad de género, es identidad de sexo, y por eso las equiparamos. Porque aprendemos que nuestra realidad biológica debe fundamentar nuestra construcción de rol de género, como parte de nuestra experiencia para ubicar nuestro lugar en la sociedad en la que vivimos, y sus sub-núcleos (familia, amigos, etc). Es parte del código de convivencia que aprendemos.

Y si todo eso se fundamento en una realidad biológica, el ir en contra de ello es naturalmente disruptivo, y los elementos disruptivos tienen, por consecuencia, que enfrentarse a la resistencia a dicha disrupción, en lugar de esperar una aceptación automática sin ser cuestionados.

Hay quienes defienden que,la disforia de género no es un trastorno mental, y la tratan como si fuera una definición casi-instintiva de la persona (aunque reconocen que se trata de minorías quienes la experimentan). Y definen que el problema de las personas trans-género son todas las demás peersonas que no les reconocen ni les tratan como el género con el que se identifican.

A mí me parece absurdo esperar que las demás personas estén obligadas a darme el trato que yo quiero, sin una realidad objetiva que lo respalde (y honestamente, aun a pesar de eso, no es absolutamente inevitable que me traten distinto a ello). Y no entiendo bien cómo esperan que la aceptación de las personas trans, no binarias y demás, ocurra como si siempre hubiesen sido mayoría o fuera algo muy cotidiano para todos, cuando a otros grupos como los gays/lesbianas, las personas discapacitadas, etc... les ha costado muchos años tener una aceptación social a pesar de sus diferencias.

Un tema en particular que llamó mi atención, fue una queja acerca de mujeres trans que estaban siendo expulsadas de baños públicos de mujeres, por otras mujeres no trans.

A mi me parce lógico, si bien obviamente forzado y quizás un poco grosero, que si los baños públicos se han diseñado en base a una realidad física y con un concepto cultural de por medio, que la haber un lugar designado para que las personas cubran una necesidad fisiológica según su sexo biológico y no según su identidad de género, que esto ocurra. Si no hubiera más baños disponibles o no tuvieran opciones para cubrir esa necesidad fisiológica, más que el baño de mujeres, entendería la urgencia de su ofensa... pero ya me parece exagerado que se ofendan en ese punto.

Se me ocurre proponer, en un comentario, que se hagan baños trans en espacios públicos, y se me procede a tachar de discriminatoria y a comparar con racista. Eso me parece incoherente, porque no me parece que la comparación tenga el mismo valor.

Supuestamente, el racismo estaba fundamentado por una ideología de superioridad, que colocaba a una "raza" como superior a otra. No porque una "raza" un día se haya autodefinido como perteneciente a otra, y por tanto quisiera ocupar los mismos espacios solo porque sí. Las personas negras no se definieron blancos de un día para otro y quisieron simplemente ocupar los lugares que ocupaba la gente blanca. Hubo un concenso social que tardó mucho tiempo en fraguarse, donde las personas se comenzaron a considerar iguales, en términos de su pertenencia a la especie humana a pesar de sus diferencias étnicas y genéticas, y en base a ello se empezaron a compartir espacios, derechos y responsabilidades, etc. No fue algo autmático, ni la segregación "racial" ocurrió tampoco de la noche a la mañana...

¿Porqué, entonces, tienen los defensores trrans y las personas progres tantas expectativas no realistas?, ¿Por que no entienden lo mucho que su demanda de reconocimiento generalizado, sin fundamento físico ni objetivo, se parece a forzar al resto de las personas, a la tiranía meramente ideológica de unas cuantas, y cuánto eso realmente se parece y casi corresponde, a la tiranía que reclaman?

Me llaman transodiante porque no estoy de acuerdo en considerar mujer a una mujer trans, con el mismo valor y/o categoría que una mujer que ha nacido mujer. Cuando la realidad y diferencias objetivas ente una y otra son evidentes.

Me llaman discriminadora por proponer la creación de espacios correspondientes a las personas trans (cuando se les olvida que los gays y lesbianas también crearon sus propios espacios) y cuando no veo por ahí a personas discapacitadas quejándose por tener espacios especialmente diseñados para ellos. Y nuevamente me pregunto... ¿estoy empezando yo a comparar cosas que no son equivalentes?, porque claramente trato de seguir la misma lógica de comparación con la que se me juzga, y me sigue pareciendo un  tanto absurda la posición de quienes me juzgan y se ofenden.

Si tomara algo que solo es definición ideológica (una preferencia, aunque hay quienes sostienen que la identidad de género no es cosa de preferencia, es decir, no es una decisión razonada ni consciente) y no algo que tiene un fundamento físico... Yo no veo a un rockero yendo a un concierto de música regional, al que no abucheen y hasta corran, por exigir qu en su presencia se haga el concierto de rock en lugar de música regional... No veo a un turista que vaya a otro país, exigiendo que los nativos le hablen en su idioma, solo porque no habla el idioma local, y teniendo mucho éxito en ello, ni al resto del mundo saliendo en su defensa...

No veo a las personas defendiendo los derechos de los menonitas, ni criticando a la sociedad por "marginarlos",cuando fueron los mismos menonitas quienes desafiaron el progreso social y decidieron apartarse de la sociedad moderna...

Sigo pensando que ya estamos en los extremos de lo absurdo, donde las personas ya están tan indoctrinadas en sus ideologías, que ya no se atreven a cuestionarlas ni a analizarlas de manera crítica, o a considerar que haya una intención neutra ante la propuesta de opciones alternativas a las que ellos quieren imponer.

Y por último,con respecto a este proceso de "normalización" de las ideologías progres (de género y raza, con esto de la inclusión forzada y las exigencias de prioridad y de "reparación de daños históricos", teoría de raza, y privilegios inherentes...) Si bien tengo muy arraigados muchos de mis conceptos al respecto, no estoy del todo negada a aprender de donde vienen y como se fundamentan estos temas nuevos, ni mee niego a cuestionar las bases de lo que pienso. Incluso he querido encontrar el valor intrínseco que tengan estas nuevas ideas, o los beneficios reales que puedan aportar a las mayorías... Pero de ahí a que sin pensamiento crítico, pruebas objetivas y razonamientos lógicos, estructurados y comprobables me crea todo lo que dicen como la única verdad existente, o al más válida... No.

Creo que como humanidad llevamos muchos años tratando de integrar y acomodar, incluso creando espacios, para muchas de las diferencias que tenemos las personas, a pesar de ser todos humanos, como para simplemente imponer a unas minorías sobre las mayorías. Creo que históricamente ha sido precisamente eso el enemigo del bienestar de la humanidad, y que lo único que justifica que eso se lleve a cabo, es cuando hay una muy marcada mejora a la existencia humana en general, por aplicarlo. Y esa mejora no la veo ni en la teoría de raza ni en la ideología de género.

No veo tampoco el beneficio de introducir a los niños en la normalización de la ideología de género (que, nuevamente, es una cuestión sólo de las minorías que la experimentan) ni en la teoría de raza (que es una franca regresión al racismo), cuando se ha comprobado que aun los adultos son altamente influenciables e impresionables hacia información falsa y/o engañosa, a pesar de tener experiencia de vida, madurez y criterio propios... y es lógicamente esperable que los menores de edad lo sean aún más. Es más, me parce altamente irresponsable hacer eso.

También me parece que las agendas respectivas de dichos temas en la sociedad son agendas políticas (sobre todo por su evidente presencia en medios de comunicación y temas sociales) y como tales, no son lideradas por los grupos que las representan, sino por grupos que quieren beneficiarse de llevar a cabo tales agendas políticas, de alguna manera, en vez de beneficiar a los grupos correspondientes a tales ideologías.

Y al final, tal como al principio, e mi propia opinión,basada en lo que he ido conociendo y aprendiendo en la vida, de lo que he ido razonando, conversando y contrastando contra la realidad objetiva, y no solo son mi percepción subjetiva de las cosas.

Fin de mi auto-debate. Gracias por tomarse la molestia de leer hasta aquí.

lunes, 25 de septiembre de 2023

Capítulo 2 - Spiders (Arañas)

Con Octubre acercándose a la puerta, "El Gato Negro" se había vuelto, en los cierres de sus fines de semana, un alegre lugarcito donde su personal se reunía en breves juntas a planear, elegir y crear su menú de otoño, tomando en cuenta las festividades de la época que se avecinaba.

Desde las bebidas y postres con toques de calabaza y distintos tipos de chocolates y menta, hasta las exóticas creaciones de panadería y coctelería experimentales, con especias e ingredientes poco usuales. La decoración del lugar también era parte de los temas de dichas reuniones, e incluso planeaban un evento a modo de mascarada.

La planeación de todo esto representaba trabajo adicional para todo el personal del pequeño café, pero la emoción y alegría de las fiestas otoñales, suplían con ánimos la energía necesaria para dar ese pequeño extra de esfuerzo que hiciera realidad cada proyecto.

Esta era, quizás, la época más alegre del año en la que todo el personal se encontraba de turno al mismo tiempo. En las demás estaciones del año, los más jóvenes tomaban vacaciones de verano, en primavera algunos pedían algunos días de descanso para disfrutar del buen clima en sitios cercanos, y en invierno el café cerraba durante un tiempo para permitir a todo el personal despedir al año viejo y recibir al nuevo.

Este año, en particular, el proyecto de la mascarada tenía entusiasmado a todo el personal, que estaban ansiosos por mostrar su creatividad en el diseño de sus máscaras y atuendos. El socio y roomie de ella estaba particularmente interesado en un disfraz de pirata/bucanero, Algunos meseros pensaban en fantasmas, ogros, hombres lobo y otras creaturas... La hostess, las cocineras y barista planeaban disfraces de brujas, hadas, gitanas, súcubos, etc... Pero Ella súbitamente cambió su idea original de una simple dama de sociedad, por algo un poco más elaborado, cuando en medio de una reunión, por casualidad notó a detalle el descenso de una araña, particularmente oscura y algo mas grande y estilizada de lo usual, por una de las ventanas, dejando que el cristal reflejase en sigilosa armonía su imagen, revelando una curiosa marca en forma de reloj de arena, de brillante escarlata, en su vientre...

Sin alarmar al personal,ella se disculpó un momento para retocar su peinado y refrescarse, tomando una taza y una hoja de papel, y dirigiéndose a la ventana que se encontraba a algunos metros de donde se encontraba sentada, esperó pacientemente a que la araña llegase al suelo, para seguirla hasta la puerta. Pareciera que la araña se dejara guiar al baño de mujeres, y al mismo tiempo que estuviera guiándole a ella lejos del resto.

Con cuidado, Ella colocó la taza boca abajo sobre la araña, que en protesta solo había alcanzado a elevar sus paras delanteras, tratando de aparentar un mayor tamaño... y luego de encerrar a tan inusual arácnida, Ella deslizó la hoja de papel por debajo, girando el conjunto de ambos objetos y atrapando así a su inesperada visitante. Aunque en un principio su primera idea era privar de la vida a la araña, Ella decidió al final colocarla en un sitio más seguro, tanto para la araña como para las demás personas, en una esfera de cristal, que por dentro contenía una esfera adicional y hueca, y que, con un líquido traslucido y espeso, daba una interesante distorsión de la imagen, acentuada por los reflejos tornasol que la luz diera en la esfera.

Una Viuda Negra, renacentista y elegante, distinguida, seductora, misteriosa y silenciosamente peligrosa pensó para sí, mientras observaba a la araña recorrer su nueva prisión. Lo siento, pequeña. Tengo que asegurarme de que no seas peligrosa, antes de liberarte. Dejó entonces a la araña, feliz con su nueva idea de disfraz, volviendo a la reunión que ahora estaba por terminar. Redactaron la minuta del día y cerraron. Mientras su socio encendía el auto, ella cerraba las puertas y aseguraba las cerradura con candados. A lo lejos, notó unos pasos que andaban en una dirección cercana y le parecían extrañamente familiares en su ritmo y maneras... pero no recordaba de primera impresión el por qué. Fue la voz de su socio, llamándola a subir al auto, lo que la extrajo de su breve desconcierto, secuestrándole de vuelta a la realidad.

"Todo bien?" le preguntó su socio.

"Sí, solo estaba cerciorándome de que todo cerrara bien" le respondió ella, tratando de ocultar bajo una ensayada apariencia de cotidianidad, lo desconcertada que estaba por aquella súbita distracción.

"Vamos a casa. Luego de una cena y un par de episodios de nuestras series favoritas, seguro estarás mas relajada". La propuesta de su socio era buena. seguro estaría seguida de una cena con la consecuente charla de los disfraces de ellos para la mascarada y de pasajes del libro que él estaba escribiendo. Todo era hogareño, pero a ella le parecía cada vez mas ajeno.

La noche transcurrió sin mayor incidente. Antes e dormir, ella investigó un poco más la naturaleza de la que ahora fuese la involuntaria inquilina de su esfera decorativa, encontrando con alivio que no era ni realmente ponzoñosa ni letal al seer humano. Al día siguiente, ella se dirigió al café con la intención de liberar a su cautiva en un jardín cercano. Para su sorpresa, se encontró con una araña similar, sin el dibujo en el vientre, que la miraba desde el exterior de la ventana, pendiente a lo que sucediera con la araña cautiva.

Ella se decidió a encogerse de hombros y no indagar de más en tan curioso comportamiento, saliendo a liberar a la araña y cerrando de nuevo el café. Al levantarse y girar para alejarse de allí, un aroma conocido pasó por su nariz, sutil y efímero, dejándole inmóvil en su sitio durante el instante que le tomara reaccionar a ello... Su respiración se pausó un momento, y retornó poco después a su ritmo usual. Cambió entonces la dirección sutil del viento, y el aroma desapareció.

Los días pasaron como las gotas de agua que caen por los cristales en una tarde lluviosa: silenciosos y ágiles. Y el día de la mascarada había llegado. Había por doquier clientes conocidos, y clientes nuevos. l personal de "El Gato Negro" se había esmerado particularmente en su coordinación y eficiencia, para que a pesar de la cantidad inusual de clientes, algunos de pudieran turnar en pequeños descansos, a disfrutar del evento. Habían reacomodado las mesas del café, para crear una pequeña pista de baila al centro, con las mesas en las orillas, para dar una serena intimidad a los que estuviesen allí sentados. La iluminación con lámparas en forma de velas y un candelabro al centro, proporcionaban una atmósfera bohemia y romántica, casi nostálgica, que contribuía al ambiente antiguo del evento. Hasta los visitantes y clientes locales se habían esmerado en su presentación y arreglo, listos para el concursos de máscaras que tendría lugar ya entrada la noche.

Ella se había ataviado con un vestido negro y una media máscara que cubría su frente, ojos, pómulos y nariz, dejando al descubierto sus labios y barbilla. De la máscara pendía un velo de encaje negro, la obvia señal de una viuda o de una mujer en duelo. El vestido era largo, con los hombros y espalda descubiertos, acentuando por casualidad su figura en todos los lugares correctos. Su cabello estaba recogido en un ligeramente intrincado peinado, dejando al descubierto su cuello, adornado por una hermosa gargantilla fina con un cascabel de plata, con su nombre grabado en una bella y sutil caligrafía: Dinah Lune.

Ella lo había encontrado en un estuche elegante, que había guardado por años, desde que dejara el instituto, como una de las pocas y preciadas posesiones que había conservado todo este tiempo, si permitirse pensar en ello... y que ahora simplemente hacía juego de manera fina y acertada, con su disfraz.

Sus zapatillas negras y los guantes largos de terciopelo, al estilo antiguo, completaban el disfraz de Ella. Sin querer, atrapaba miradas y más de una vez escuchó al pasar un "quien es ella?" ya fuera con admiración, envidia o interés, o simple curiosidad.

Para lo que no estaba preparada era para que, a la entrada de un vals en la lista de reproducción del evento, desde su espalda, una mano tomara la suya con intencional y firme elegancia, con otra rodease de manera segura y posesiva su cintura, y al paso que le llevase a la pista de baile, le preguntara, con fingida naturalidad, como si fuera sólo por trámite:"Señorita Lune, me permite este baile?"

Su cuerpo se movía por sí mismo, entrando en una muy conocida manera de conducirse, tan natural como respirar y tan antigua como el tiempo, dejándose guiar suavemente por los movimientos de su inesperado compañero de baile. Recuperándose poco a poco y ganando terreno su conciencia, Ella fue elevando despacio la vista, buscando el rostro de su compañero de baile. Cada detalle le parecía más inverosímil que el anterior, desde su elegante traje, con las mancuerrnillas grabadas con el escudo familiar, el impecable arreglo de la camisa, chaleco y saco, la delicada y fragante rosa en su bolsillo del pecho, sus guantes, su cuidadosamente arreglado cabello, sujeto elegantemente con una sencilla cinta, y la encantadoramente demoníaca sonrisa en sus labios.

Temerosa de confirmar sus sospechas, tragó saliva nerviosamente, remojándose el labio por reflejo y mordiéndolo un poco, presa de lo incierto, mieras su corazón se detenía por un segundo, mismo que transcurría mientras su mirada ascendía lentamente por su elegante y sencilla máscara, adornada como la suya con una araña en un costado, en perfecto contraste de diseño y color, cual si las hubiesen hecho a juego. Se detuvo en sus ojos, oscuros y profundos, a punto de perder el aliento. La fuerza en su cuerpo la abandonó un breve instante en el que el la abrazó con firmeza y ella se aferró a sus hombro... lo que pasó inadvertido para los demás, que estaban ocupados en su propio disfrute de la fiesta.

Los labios de él encontraron la piel del hombro desnudo de ella, encendiéndola. "No me ha sido fácil encontrarle" le susurró él al oído. Ella no pudo evitar temblar en sus brazos, sintiendo a flor de piel todo lo que ella había pretendido enterrar junto con el Instituto en su pasado. Una lágrima amenazaba con escapar de sus ojos y poco después escapaba por su mejilla. Él, al notarla, se apresuró a besarla, posesivo hasta con sus muestras de emoción. Continuaron bailando en silencio, dejando que el vals permitiera que sus cuerpos hablaran en vez de sus palabras.

A la mente de Dinah volvieron las noches bajo la luna, en los jardines del Instituto, sus paseos nocturnos y aquella curiosa costumbre de Alexander, su amado Lord Lanuit, de decidir, inesperadamente, bailar allí con ella, al capricho de la música en su mente. Ella cerró los ojos un momento, disfrutando de la belleza nostálgica de sus recuerdos, reconociendo que sin saberlo,había sido muy feliz y había forjado recuerdos pequeños e inmesurablemente hermosos como ese. Nunca más, hasta ese momento, había experimentado nuevamente el baile de forma tan natural e íntima, y por un momento se descubrió sonriendo sin poder evitarlo, encantada de no sentir el vacío que desde hace tiempo le acompañara. Era ciertamente un efecto inesperado. Todo aquello era como estar soñando. Ella quería preguntarle tantas cosas... Pero la música paró, el vals había terminado. Él tomó la rosa del bolsillo en su pecho y se la entregó luego de besarla, un gesto tan natural y elegante que a nadie tomó por sorpresa, tomándolo como parte de su personaje en la mascarada, y desapareciendo entre los invitados y clientes.

Ella permaneció en silencio, volviendo poco a poco y por reflejo, a su ensayada naturalidad y a su rol de anfitriona, atendiendo nuevamente a sus invitados y clientes el resto de la velada, con la flor cuidadosamente colocada en la esfera donde estuviera antes la araña, a modo de moderno florero. Ahí le dejó toda la noche hasta el cierre de la mascarada, cuando todos se fueron a dormir y ella se quedó con su socio a cerrar cuentas y preparar las labores de limpieza para el día siguiente.

Ella se había colocado una chalina negra a los hombros, cubriéndose con ella también la espalda. "Te ves particularmente radiante y hermosa, a pesar de estar cansada" le dijo su socio para animarla. Ella instintivamente se cubrió un poco mas. "Gracias" le respondió ella, y él se acercó y como caballero la guió hacia el auto, llevándola a casa, cuidándola como quien cuida algo propio y cercano. Entraron cada cual a su cuarto, pero mientras él dormía tranquilo, ella en silencio repasaba lo ocurrido. Un pequeño y sutil dolor llamó su atención, en su hombro, donde Alexander la hubiere besado. Una vista al espejo, la mañana siguiente, le revelaría por qué, donde una marca rojiza, muestra de su posesivo amo, ahora reposara en su piel, impidiendo que olvidara lo acontecido y dejando a Dinah con mas preguntas que respuestas.

miércoles, 20 de septiembre de 2023

Capitulo 1 - Dream (Sueño)

El tiempo lejos del Instituto había pasado en un abrir y cerrar de ojos. Aunque ella se mirase al espejo y tuviera apenas unos años más encima, se reconocía a sí misma, con su mirada intensa y su sonrisa segura, casi un poco confiada.

Aquella mañana el sol era particularmente brillante y el calor de los días que transicionan de primavera al verano era particularmente intenso.

Se levantó de la cama, tomó un baño para refrescarse, se vistió, alistó su ropa de trabajo y se dirigió al pequeño cafe que habia abierto, con un poco de dinero y mucho y constante esfuerzo.

Se había asociado con su el compañero de cuarto con el que llevaba ya años viviendo, cada cual en una habitación de la no muy espaciosa, pero acogedora casa que compartían. Los años habían pasado en un abrir y cerrar de ojos, y el pequeño café había comenzado a tener algunos clientes regulares, y algo de reconocimiento en la comunidad donde ella había vivido durante este tiempo.

Para el observador casual de entre los clientes del café, paciera como si las habilidades de servicio de ella fueren cosa de su crianza en casa, y no el resultado de una elaborada formación como sirviente de alta categoría, por la forma tan relajada y hogareña en la que ella se desenvolvía en sus actividades en la barra.

Su compañero y socio dirigía y ayudaba en la cocina, mientras que ella supervisaba a los meseros y a la anfitriona. Habían desarrollado una dinámica coordinada al paso del tiempo, compleja y fina como si se tratase de un reloj suizo. El pequeño café, llamado El Gato Negro", tenía una atmósfera cálida de bienvenida, y podía sentirse como un lugar tranquilo y seguro en donde disfrutar de un poco de tranquilidad, privacidad y seguridad.

El día transcurrió como lo hacía desde hace tiempo, en una ocupada serie de tareas, pequeñas conversaciones casuales con los clientes y el personal, las labores de aseo, cuentas y preparación para la semana siguiente. Al final, luego de cerrar, ella y su socio tomaron una ligera cena en una de las mesitas del jardín trasero, que reservaban para su uso personal.

"Nos vamos a casa?" le preguntó su socio. Ella dudó un instante, distraída al darse cuenta que, de repente, ya habían pasado años desde que ella saliera deshonrosameente del Instituto... el recuerdo que ella creía enterrado en su mente la tomó por sorpresa.

"Te alcanzaré después, hoy quiero caminar a casa. Ha sido un día caluroso y quiero despejarme"

Si socio asintió, por un breve instante la miró desconcertado y una sombra pasó por su mirada, desvaneciéndose de inmediato. Ella estaba tan ensimismada que no pudo notarlo. Él salió del café, abordó su auto y se fué.

 Ella permaneció en la mesita un momento más, disolviendo distraídamente un pequeño cubo de azúcar en su bebida, mientras su mente le llevaba por los años que habían pasado desde entonces. Las imágenes en su mente pasaban una tras de otra, como pequeñas escenas en el resumen de una serie: La noche en la que vagaba por las calles de Francia, caminando sobre las mojadas calles nocturnas, luego de la lluvia, ensimismada, sin rumbo. El momento en que distraída, chocara con un hombree vestido con un traje de color claro,quien calmadamente le preguntase si ella se encontraba bien. Una subsecuente cena juntos, mientras platicaban de sus anhelos y de su mutuo deseo de emprender un negocio propio. La invitación a compartir una casa y los consecuentes gastos. La inauguración de "El gato negro", los primeros clientes, cumpleaños, navidades, cenas de año nuevo, los primeros aniversarios del café que abrieron juntos, las experiencias cotidianas de los quehaceres, las noches de películas y series en el sofá, los eventuales juegos de mesa, la convivencia entre sus familias (lo que quedaba de la familia de ella, y la curiosa familia de él).

 Mientras caminaba a casa, ella cayó en cuenta de que había logrado, a base de mucho esfuerzo y a pesar de algunas peleas fuertes con su socio, una cierta tranquilidad y estabilidad, al grado en que casi había olvidado el Instituto, y todo lo que en él dejó atrás... 

Llegó a casa ya un poco entrada la noche. Entró procurando hacer el menor ruido posible, para no molestar o interrumpir a su socio mientras escribía en su laptop, como era su costumbre en estos días. Hace poco él se había decidido a tomarse con mayor seriedad su pasión por la escritura, y ella estaba contenta de verle practicar. Mientras ella sonreía con ternura, tocó suavemente a la puerta de la habitación de él."Ya estoy en casa, cenaré y luego me iré a la cama, descansa"

Luego de su breve saludo, del cual no esperaba respuesta, se preparó un té y salió a la banca/columpio que tenían en el pórtico, se sentó allí, cubierta por una suave y ligera manta, a admirar las estrellas. Mientras dejaba a su mente perderse en sus pensamientos, notó qu ella y su socio parecían una pareja casada hace mucho tiempo, y sin embargo,no podía evitar sentirse muy lejos de ello.

Si bien cohabitaban una casa y compartían un negocio, ella se sentía cada vez más sola, aislada, incomprendida... y había una sensación de vacío que ella no deseaba explorar, algo que le faltaba, desde hace mucho tiempo.

Tomó entre sus manos una novela oriental, de una de esas historias de reencarnación que recientemente se habían vuelto por demás populares, y que apenas hace poco había comenzado a leer, para familiarizarse con ese tipo de historias y entender un poco mejor los comentarios y consultas que de vez en cuando le hiciera su socio respecto a su nuevo escrito.

En su mente, los personajes de la novela cobraban vida, animados por su imaginación...

Un señor Feudal, vestido en una lujosa túnica negra con intrincados diseños, pintados y bordados delicadamente a mano, su cabello largo y lacio, cuidadosamente arreglado, le caía por los hombros y espalda. a unos pasos detrás de él se encontraba con una joven, cuyos vestidos carmesíes eran de una calidad visiblemente inferior y toscos en comparación. Ambos se encontraban en un jardín.Él en el pequeño y hermoso puente que atravesaba el riachuelo que dividía en dos al jardín. Ella sobre el camino empedrado que llevaba al puente. Él le daba la espalda a ella, y cuando le habló, su voz era su voz fría y llena de orgullo.

"Qué haces aquí?" Le preguntó a ella, con tono arrogante y exigiendo una respuesta.

"Vine a buscar una audiencia con Usted" le respondió, en tono decidido,pero respetuoso, sin abandonar la pose de reverente saludo que sostenía, con una rodilla al suelo y sin levantar la mirada.

"Qué es lo que quieres?" le preguntó dejando entrever la mezcla de fastidio y desdén que ella lee provocara, mientras se volvía para mirarla, enfadado.

Ella por fin elevó su mirada para cruzarla con la de él, en el rostro y los ojos de ella se adivinaba una profunda tristeza y el dolor que causaba la forma en que él la trataba, si acaso todo aquello pareciera enterrado por la neutralidad de su expresión.

"Vine a hablar contigo" le dijo con voz suave, levantándose con calma de su postura. "Tengo cosas que decirte" Su tono más bien parecía una confesión. Ella cerró el espacio entre ellos en unos pocos pasos que, aunque intencionales, no eras amenazantes. El gesto de él se volvió iracundo, elevó su voz con ira y le profirió reclamos, mostrando quizás si querer su orgullo herido por las faltas que procedió a reclamarle, desnudando su ego herido ante la pérdida que todo aquel incidente del pasado y sus complicadas ramificaciones implicaran para él, en la forma me la pérdida de prestigio resultante...

Ella recibió con calma y tristeza todos y cada uno de los hirientes dardos de sus acusaciones. En vez de defender su postura y sus acciones, dejó que el silencio la asumiese culpable.

"Quiero de ti a la persona que siempre has sido, cuando estamos solos..." Le dijo ella con ternura y cariño al oído, en un tono que sólo él podría haber escuchado. La sorpresa en los ojos de él, abiertos por un momento, dieron paso a la imagen de aquella escena, que se disolvía en una niebla conocida, mientras un aroma conocido se filtraba en su memoria y unas cálidas manos colocaban sobre su cuerpo el saco de un traje, al tiempo que la conocida y lejana voz se perdía en la niebla: "También te he extrañado. Buenas Noches, Mía"

Ella abrió los ojos, mientras la niebla de su sueño se dispersaba y la manta que se había echado encima caía al suelo. Su té hace tiempo que se había enfriado, y el libro qu leía yacía abierto sobre su pecho.

En un largo suspiro, antes de dirigirse a su habitación, ella tuvo que reconocer que su vacío tenía un nombre: Alexander Asriel Lanuit. Y que sin importar cuanto tratase ella de enterrar su pasado, su corazón nunca le olvidaba... y probablemente nunca lo haría.

domingo, 3 de septiembre de 2023

OCTUBRE EN TINTA

 Curioseaba en medio de la inmensidad del mar internauta, cuando me topé con un proyecto que se ha hecho conocido al paso de los años como "Octubre en Tinta".


Si bien no soy la peor dibujante, confieso que las imágenes de mi mente se ven infinitamente mejor que el resultado de lo que plasmo en papel, jeje.


Aun asi, el proyecto correspondiente de este año, en la lista de conceptos que propone ilustrar, ha capturado mi mente con las visualizaciones que veo en muchos de ellos.


Y me ha asaltado la mente la iniciativa de plasmarlos en texto, lo cual quizás se me de un poco mejor que el dibujo...


A continuación, la lista de conceptos de este año para "Octubre en Tinta":

1-Dream

2-Spiders

3-Path

4-Dodge

5-Map

6-Golden

7-Drip

8-Toad

9-Bounce

10-Fortune

11-Wander

12-Spicey

13-Rise

14-Castle

15-Dagger

16-Angel

17-Demon

18-Saddle

19-Plump

20-Frost

21-Chains

22-Scratchy

23-Celestial

24-Shallow

25-Dangerous

26-Remove

27-Beast

28-Sparkle

29-Massive

30-Rush

31-Fire


Veamos a donde nos lleva este proyecto, jeje.

LGR2